Distinto. Esa es la palabra que elegimos para referirnos al servicio. ¿Por qué distinto? Porque esta vez la huella fue plasmada no solamente a través de la mano de obra, sino que el intercambio cultural tuvo su aporte, ¡Y que aporte!
El desafío fue muy grande. Primero, una cultura desconocida en grandes aspectos. Compartimos con los mapuches de la Comunidad Ruca Choroi 10 días, donde izábamos la bandera juntos, nosotros haciendo el saludo scout y también saludándonos con un "Mari mari" que significa "buen día" en mapudungun. No solo eso, compartimos clases en las aulas, la cocina con las cocineras- que mmm.. ¡Que pan!- y un día de recreación donde nos divertimos mucho. Respecto al trabajo en si, que en el "vamos" fue el que nos ligó hasta ahí, también fue bastante particular. La pintura no fue tan protagonista como esperábamos; tuvimos mucho trabajo en madera, hacer bancos y sillas, compost para la huerta, carteles de señalización, arreglo de juegos de plaza, entre otros.
Fueron 14 días donde la Comunidad Impeesa se nutrió y se fortaleció, como aspiraban los objetivos. El compañerismo fue esencial para construir el tan preciado TRABAJO EN EQUIPO.
Siempre listos para servir.
Comunidad Impeesa.